Tenerife es mucho más que sus playas o que su capital. La isla atesora pueblos de elevado interés para conocer, con sitios históricos, ubicaciones idílicas y rincones pintorescos. Tanto es así que muchos de ellos han sido catalogados como Conjunto Histórico.
Repasamos algunos de los pueblos más bonitos de la isla de Tenerife, perfectos para relajarse en ellos unos días o programar excursiones desde localidades cercanas y disfrutar de las Canarias.
Garachico

Garachico constituyó el puerto principal de Tenerife hasta que el volcán de Trevejo entró en erupción en el año 1706 y parte del pueblo quedó arrasado. Pero Guarachico resurgió de las cenizas y continuó siendo una de esas villas acogedoras y hermosas, cuyo centro antiguo fue catalogado como Conjunto Histórico en el año 1994.
No te pierdas el castillo fortaleza de San Miguel, del siglo XVI; edificios religiosos como la iglesia de Santa Ana, la ermita de San Roque, el convento de la Inmaculada Concepción y el antiguo convento de Santo Domingo, que alberga el Museo de Arte Contemporáneo. Y tampoco dejes de disfrutar de las piscinas naturales, conocidas como El Caletón, en este hermoso pueblo situado a unos 63 kilómetros de Santa Cruz de Tenerife.
Tegueste

Con un casco antiguo declarado en 1986 Conjunto Histórico-Artístico, el pueblo de Tegueste se localiza en el entorno del Parque Rural de Anaga. Entre su patrimonio arquitectónico destacan la iglesia de San Marcos, el antiguo ayuntamiento, La Placeta y la Casa del Prebendado Pacheco. No dejes de recorrer el Camino de los Laureles y la Travesía de los Viñedos y la Campiña de Tegueste, ya que Tegueste es un destino en el que el enoturismo adquiere especial importancia y en el que podrás realizar rutas enohistóricas para conocer el territorio.
Güímar

Güímar se sitúa en el valle homónimo, en un entorno único a unos 28 kilómetros de Santa Cruz de Tenerife. La villa está catalogada como Conjunto Histórico-Artístico y entre sus edificios de interés destacan la iglesia de San Pedro Abajo, la capilla de San Pedro Arriba, la iglesia de San Pedro Apóstol y la iglesia de Santo Domingo Guzmán. Tampoco te pierdas el sitio histórico de la cueva de Chinguaro y el Parque Etnográfico Pirámides de Güímar, con el Museo Casa Chacona y el Jardín Venenoso.
San Juan de la Rambla

En el norte de la isla de Tenerife, se localiza San Juan de la Rambla, con un hermoso casco histórico, catalogado como Conjunto Histórico-Artístico. Aquí es posible visitar el Barrio de los Quevedos, conocer el patrimonio arquitectónico religioso como la iglesia de San Juan Bautista y descubrir sus edificios históricos civiles de entre los siglos XVI y XVIII, como la Casa de los Alonso del Castillo y la Casa La Alhóndiga.
La Orotava

Con una parte antigua también declarada Conjunto Histórico-Artístico, La Orotava es otra de las villas más hermosas de Tenerife. Ubicada a 390 metros de altitud, además de su patrimonio religioso, como es el caso de la iglesia de San Agustín, sorprenden sus casonas y mansiones tradicionales de los siglos XVII y XVIII, así como el jardín Hijuela del Botánico, el Museo de las Alfombras y el Museo de Artesanía Iberoamericana de Tenerife-MAIT.
Puerto de la Cruz

El Puerto de la Cruz es uno de los exponentes del turismo en las Canarias, si tenemos en cuenta que este lugar se declaró Lugar de Interés Turístico Nacional en el año 1955. Pero además de ello es otra de las localidades más bonitas de las islas, por lo que merece ser incluida en nuestra particular selección, aunque por su número de habitantes también podría considerarse una ciudad pequeña.
Puerto de la Cruz cuenta con más de un centenar de edificios históricos protegidos, hermosas callejuelas y lugares como la ermita y el Paseo de San Telmo y el barrio de pescadores, entre muchos otros puntos de interés. Además, destaca por el proyecto denominado Puerto Street Art, un auténtico museo al aire libre, así como el Jardín de Aclimatación de La Orotava y el zoológico Loro Parque.